Miró al cielo e imploró por una respuesta, el "cacho" no llegaba a comprender cómo sus jugadores no supieron definir las chances claras que tuvieron.
Uruguay hizo casi todo bién: presionó en la salida del rival y lo ahogó en el medio. Pero justo falló en las dos áreas: se durmió en la propia y no definió en la de enfrente. Obradoiro fue la contra cara perfecta: tuvo una puntería de francotirador y sacó todo lo que los uruguayos no tiraron a fuera. El Obradoiro sólo se dedicó a aguantar la arremetida y a soñar con algún contragolpe. Y el sueño se le hizo realidad doblemente, porque a los 20 y a los 25 del segundo tiempo acertó en jugadas parecidas. El descuento celeste (ayer de rojo) a falta de 5 para el final aumentó mas la presión del Charrúa sobre el hostelero. A Uruguay no le alcanzó, pese a que tuvo al rosa contra el arco, creó mucho peligro pero no la metió. Justo al revés que Obradoiro.
Miró al cielo e imploró por una respuesta, el "cacho" no llegaba a comprender cómo sus jugadores no supieron definir las chances claras que tuvieron.
ResponderEliminarUruguay hizo casi todo bién: presionó en la salida del rival y lo ahogó en el medio. Pero justo falló en las dos áreas: se durmió en la propia y no definió en la de enfrente.
Obradoiro fue la contra cara perfecta: tuvo una puntería de francotirador y sacó todo lo que los uruguayos no tiraron a fuera.
El Obradoiro sólo se dedicó a aguantar la arremetida y a soñar con algún contragolpe. Y el sueño se le hizo realidad doblemente, porque a los 20 y a los 25 del segundo tiempo acertó en jugadas parecidas.
El descuento celeste (ayer de rojo) a falta de 5 para el final aumentó mas la presión del Charrúa sobre el hostelero.
A Uruguay no le alcanzó, pese a que tuvo al rosa contra el arco, creó mucho peligro pero no la metió. Justo al revés que Obradoiro.