lunes, 20 de diciembre de 2010

Copa: Descubrieron la fórmula. Hotel Lino 3-1 Uruguay.


Fotos del partido

Ariel disputa un balón. Uruguay de rojo.

El hotelero aspira trepar alto, le quitó el invicto al Uruguay.
Por el mismo grupo el Meigas goleó al Patateiros y se puso en cabeza.

1 comentario:

  1. El capitán uruguayo al término del encuentro dijo: Hubo claro fuera de juego en el segundo gol del Lino pero eso no justifica la derrota. Te lo digo claro, merecieron ganar de todas maneras.

    El Hotel Lino jugó con mucha autoridad le ganó bien al Uruguay y se encamina en la lucha por el título.
    Desde el comienzo mismo del partido el Lino dejó claro sus aspiraciones cuando en una sola jugada envió dos tiros a la madera.
    Fue todo una señal ese arranque.Porque los hoteleros salieron desididos a marca la cancha, a sentar posición ante el conjunto Charrúa, al que no se le puede dar un metro de ventaja. Pero que en la tarde noche del sábado arrancó dormido y lo pagó en esos primeros minutos. Que no sabía que hacer, sí atacar o defender- no hizo ni una cosa ni la otra.- Entonces el local sacó una contra letal, de esas que lastiman a cualquiera y se puso en ventaja. Los celestes (de rojo) movieron el banquillo y se fueron en busca de la igualada que lograrían poco antes del descanso.
    Para la segunda parte la cosa estuvo mas equilibrada durante el primer cuarto de hora pero a partir de ahí el partido se empezó a definir en el medio del campo, donde los volantes hoteleros les ganaron las espaldas a los uruguayos. Esa diferencia fue determinante para uno y otro.
    Si, los centros campistas de Lino cortaron todo y más, por derecha, por el medio, también por la izquierda. No solo eso, a la vez se sumaron en ataque y terminaron siendo rueda de auxilio de sus delanteros. El hotel marcó el segundo, los uruguayos reclamaron fuera de juego pero el árbitro dió por válido el tanto.
    Entonces el conjunto sudamericano salió a jugar sin medir las consecuencias. Estaba un gol abajo y nesecitaba sumar gente en ataque, aún sabiendo a lo que se exponía pero se empecinó en tirar pelotazos al punta, lo que simplificó la tarea de los defensores hoteleros. La respuesta local fue practicidad, a un toque, siempre y hacia los costados y hasta encontró un poco de mala suerte, otro poco de falta de puntería y finalmente se encontró con un inspiradísimo portero uruguayo con tapadas notables como aquellas dos al hilo a boca de jarro.
    Luego el 3-1 de penalty y a otra cosa.
    Entonces en resumen el Hotel Lino había golpeado en el momento justo, allá cuando el partido se estaba armando y volvió a golpear cuando la cosa amagó con ponersele negra. Victoria al fin de cuentas de esas que tienen un sabor distinto. Dejar sin invicto a su rival.

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